domingo, 10 de febrero de 2013

Capítulo 3 «As long as she loves me²»



◘ Heather O’Connor.


            Nos sentamos el uno frente al otro en la cafetería, y él clavó sus ojos en los míos. Me fijé en que tensaba la mandíbula y movía la pierna como si temblara. Pero no se daba cuenta. Simplemente, mantenía su mirada fija en la mía.
            —¿Brandon…? —susurré—. Uhm… ¿ocurre algo?
            Vaciló antes de contestar, y tardó unos instantes en decidirse a hacerlo. Unos instantes que se me antojaron eternos, y tal vez lo fueron, quién sabe.
            —Heather —balbuceó.
            Era la primera vez que lo veía de este modo, siempre parecía muy seguro de sí mismo, y, si no era así, ocultaba a la perfección sus inseguridades desde la primera vez que lo conocí.
            —Esto… —continuó—. ¿Saldrías conmigo el sábado por la noche?
            Abrí los ojos de par en par, y fui completamente incapaz de pronunciar palabra.
Más aún cuando susurró:
—Me he enamorado de ti.

♣ • ♣

Recuerdo aquel día mientras conduzco de vuelta a casa. No estoy segura de lo que pasó después, simplemente pienso en lo vulnerable que parecía en aquel momento a pesar de parecer siempre tener las riendas de todo lo que lo rodea, tomar decisiones y que todo le fuese fácil… cuando me susurró que debería tener más cuidado y yo únicamente le pregunté sobre sus modales.
En aquel momento pensé cosas horribles de él.
Y míranos ahora.
No… no pienso echarlo todo a perder. No en este instante, cuando tomo empezaba a ir bien.
—Esto no cambia nada —me digo a mí misma.
Nada es diferente ahora.
Soy yo quien gana. Porque… amo a Brandon, ¿no? Pero si es así, ¿por qué no puedo contarle lo que pasa? Él sabe qué ocurrió hace dos años, lo oí hablar con Tracy una vez, ella suplicaba que no me hablara del tema, pero solo quería hacerlo consciente. Solo le habló del secuestro. No mencionó al ladrón que se llevó mi corazón también…
Quería que las cosas fuesen diferentes. Y lo fueron.
¿Por qué ha tenido que pasar esto? ¿Por qué ahora todo se tambalea? ¿Y todo lo que me ha costado conseguir lo que tengo ahora?
Entierro la cara entre mis rodillas, sintiéndome avergonzada.
«La diferencia, es que él cumplió su promesa. Yo no.»
Me dijo que nunca me dejaría. Él me trataba como no lo hacía nadie. Brandon me cuida, me ayuda. Pero no es lo mismo.
De repente eso me parece poco importante. Me levanto de un respingo.
«¿Y si mi padre se ha enterado? ¿Y si decide ocuparse él?»
Jason lo dejó en evidencia. Ni él ni Drake eran los más peligrosos, pero sí los más buscados. Hacían lo que no podía conseguir nadie, no sé cómo, pero era así.
—Consiguieron llevarse lo más importante —susurro—, la paciencia de mi padre.
Que había estado mantenida a prueba desde hacía unos meses. Supongo que Tracy le pedía que me dijera lo de la boda, aunque tardaron en hacerlo. Demasiado.
Y eligieron el momento idóneo. Ya que, si no hubiese sido por eso, ninguno de nosotros estaría hoy aquí. Habría sido un robo. Pero no un secuestro.
Y yo no lo habría conocido.
Y tampoco me habría enamorado.
El principal problema, es que estoy feliz de que todo pasase de la manera
en que pasó. Porque para mí ha sido un factor vital.
            Sin ello, tampoco habría aparecido Brandon, el cual, puso su granito de arena y estuvo conmigo desde aquel día en que pensé que íbamos a pelearnos, porque había pasado peligrosamente cerca con su moto hasta que…
            No recuerdo bien cómo, nos hicimos muy amigos, y al tiempo me pidió salir.
            Me acuerdo de no pensar en el antes cuando estábamos juntos, solo en el ahora, que determinaba el después. ¿Duraría? Tal vez. Tal vez no. Lo mejor era que daba igual pero una parte de mí, una parte de mi corazón… latía por Jason. Única y exclusivamente para él, porque se lo regalé, y entonces aprendí por qué hay que pensar bien a quién le regalas determinadas cosas.
            Pasan a ser suyas.
            Para siempre.
           
♣ • ♣
           
—¿No quieres salir hoy? —me pregunta al otro lado del teléfono.
—La verdad es que no, pero ¿qué te parece si te vienes a casa y, no sé, vemos una película o algo así? Papá y Tracy no están aquí.
Ríe. Esa risa contagiosa que tanto me gusta y tanto me ánima. Y hoy no es una excepción. A pesar de todo.
—Claro. Ya mismo llego.
Y mientras estoy haciendo las palomitas, llaman a la puerta. Una, dos, tres veces. Sonrío instintivamente.
—Buenas —me da un beso en la mejilla—. ¿Cómo estás?
Relajo los hombros.
—Pues como siempre —contesto.
¿Siempre estoy preocupada? ¿Siempre estoy asustada? ¿Siempre tengo miedo? ¿Siempre siento una opresión en el pecho? ¿Siempre parece que todo a mi alrededor da vueltas? ¿Siempre parece que mi vida no es real, que intenta parecerlo pero todos a mi alrededor actúan?
Pues no, la verdad.
Así no es como estoy siempre.
Sé que aunque Jason odiara hacer lo que hacía, se sentía protector a mi lado, aunque nunca me lo dijese, yo simplemente lo intuía. Por eso temo lo que pueda llegar a hacer. Admito, que era bastante temperamental. Pero aun así lo quería tanto.
¿Es posible que siga sintiendo todas esas cosas? ¿Es posible que siga estando enamorada de él? ¿Es posible? ¡Necesito respuestas!
Fuertes y firmes brazos me rodean la cintura. Giro la cabeza y beso a Brandon con fuerza. Mis dedos tiran de su pelo, y lo noto sonreír. Él me presiona contra su cuerpo. Me abraza con fuerza, y me besa el cuello. Río.
—Te quiero tanto, Heather… —susurra con sus labios posados sobre mi frente.
Sonrío instintivamente, pero enseguida se me borra.
No estoy segura qué responderle.

No hay comentarios: